Tatiana Medina y Marianela Borio, nutricionistas del “Pirata”, dialogaron con Vía Córdoba. El efecto Farré, el postre favorito de Vegetti y el papel en la epopeya en San Nicolás.
La alimentación es una base fundamental en el rendimiento de todo deportista, dentro y fuera de la cancha. En Vía Córdoba, hablamos con las nutricionistas de Belgrano, Tatiana Medina y Marianela Borio, para que nos cuenten los pilares alimenticios y algunas curiosidades del título obtenido en la Primera Nacional.
“Hoy, nos alimentamos para el rendimiento deportivo. Mañana, como un estilo de vida y es por eso que no manejamos una dieta específica”, ese es el mensaje que le transmitieron las Licenciadas en Nutrición a los jugadores de Belgrano desde su llegada a la institución.
Ambas trabajan en el club desde el año 2019 y vivieron toda la estadía del celeste en la segunda división del fútbol argentino. Desde un primer momento, buscan “escuchar al jugador y conocer su entorno al 100 por ciento”.
Carbohidratos, proteínas, vitaminas, minerales y grasas son los pilares de toda alimentación. En el caso de los deportistas, los hidratos son la principal fuente de energía para afrontar la actividad, mientras que las proteínas favorecen la recuperación muscular.
“Los nutrientes juegan en distintos momentos del día y temporada; varían en función del entrenamiento, posición, partido y objetivo de cada persona”, detallaron las profesionales. Precisaron que trabajan con GPS para adecuar los nutrientes a cada contexto y desgaste.
“Hay que tener en cuenta que los jugadores son personas y cada uno tiene sus costumbres. Nosotras buscamos una sostenibilidad y adherencia en la alimentación con la incorporación progresiva de buenos hábitos”, empatizaron Medina y Borio.
Esta última explicó que “hay todo tipo de situaciones: jugadores que tienen su familia formada, suplentes, juveniles que inician su carrera y futbolistas que llegan solos a una ciudad nueva”. Por eso, tienen una charla “larga y tranquila para escuchar al jugador que llega a la institución”, según detallaron.
“Educar al deportista para que seleccione el alimento adecuado a su contexto, objetivo y necesidad”, respondieron al ser consultadas sobre la clave para “el coso” conseguido. Y explicaron: “En los hoteles, tienen de todo para comer y es fundamental saber qué se necesita para rendir bien”.
Guillermo Farré es el entrenador de Belgrano desde mayo de 2021. Su arribo marcó un antes y un después en el plantel a partir del “orden y “tranquilidad” como sus características principales.
Al ser consultada por la incidencia del DT en el plantel, Borio respondió: “Se logró una mayor unión como equipo y esa homogeneidad se vio reflejada en el rendimiento en cada fecha”.
Por su parte, Medina agregó que Farré “logró una sostenibilidad en el club que permitió que el resto de jugadores e integrantes se acomoden para alcanzar el objetivo”.
El domingo fue una jornada marcada por la ansiedad y nerviosismo. Medina recordó cómo fueron las horas previas y posteriores en cuanto a la comida: ”Los que querían desayunaban a las 10 u 11 o se comían un plato de fideos previo al partido con Brown de Adrogué”.
“La comida postpartido iba a ser a las 17 y planificamos que sean pizzas por el desgaste físico que tuvieron y porque podía llegar a ser un día festivo”, recordaron. Sin embargo, fue un almuerzo ”muy engorroso”.
“No había señal en San Nicolás y no sabíamos si el pizzero iba a poder pasar todas las barras de seguridad. Cuando las pizzas llegaron, fue un momento de paz y disfrute porque los jugadores tenían bastante hambre”, evidenciaron entre risas.
Como todo el mundo, cada jugador tiene sus gustos y preferencias. En este sentido, las nutricionistas revelaron que “no importa la dieta o alimentación, a Vegetti no le toques el postre de queso y dulce de membrillo”.
Cabe destacar que cuatro meses antes del logro obtenido, el delantero prometió no tomar alcohol hasta conseguir el ansiado ascenso. Esa promesa terminó luego del triunfo ante Brown, cuando circuló la postal del capitán con una cerveza y el mensaje “¡Salud campeón!”.
“El alcohol interfiere en el proceso de recuperación y perjudica la próxima jornada de entrenamiento que debe afrontar el deportista”, respondieron las Licenciadas sobre la incidencia de las bebidas alcohólicas.
Además, revelaron que, como buen arquero, Nahuel Losada “no te deja pasar la tarta de jamón y queso”. La palta y la pastafrola de membrillo son algunos de los alimentos más pedidos por el plantel en general.
Al ser consultadas sobre lo que significó para ellas el ascenso a la Liga Profesional, revelaron que “es una recompensa a tres años de trabajo que venimos haciendo”. “Entramos cuando Belgrano se había ido a la B. Transitamos cambios de dirigentes, técnicos, jugadores y una pandemia. Fue un proceso largo y difícil”, reflexionó con orgullo Borio.
“Somos mujeres y no fue fácil encontrar y hacernos el lugar. Nos contrataron para una vez cada tres meses y para ser profesionales externas al club. El estar en el colectivo festejando fue un gran salto y fruto del trabajo de hormiga que hicimos en conjunto a lo largo del tiempo”, concluyeron.
Al igual que todo el pueblo pirata, “estamos disfrutando del momento”. A pesar de lo conseguido, aseguraron que van a seguir trabajando con la misma responsabilidad de siempre. Sin embargo, reconocieron que deberán tener en cuenta una “mayor carga horaria, más concentraciones y trayectos más largos”.
Tatiana Medina tiene 28 años y es oriunda de Freire, al igual que Santiago Longo. Mientras que Marianela Borio, de 31, es de Eduardo Castex, La Pampa. La misma provincia que el autor del gol del ascenso, Joaquín Susvielles.
Ambas son egresadas de la Universidad Nacional de Córdoba(UNC), pero empezaron a trabajar juntas cuando se cruzaron en un ascensor de Nueva Córdoba. “Éramos vecinas y no lo sabíamos hasta que nos cruzamos y una le preguntó a la otra:
-Ay! Me re interesa, te puedo acompañar?”, revelaron.
Una casualidad que fue clave para el histórico triunfo y ascenso del Club Atlético Belgrano.