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Alquist 3D, una empresa con sede en Iowa, está revolucionando la forma de luchar contra la crisis de vivienda asequible que se vive en Estados Unidos y ha comenzado a construir viviendas de hormigón con tres recámaras en Virginia, que están listas en solo 30 horas a través de una impresora 3D.
La empresa se asoció con la fundación Habitat for Humanity Peninsula & Greater Williamsburg y el pasado 22 de diciembre entregaron las llaves de la primera casa.
El fundador y director ejecutivo de la empresa, Zach Mannheimer, dice que la impresión 3D reduce los costos hasta en un 15 % al disminuir la mano de obra, los materiales y el tiempo.
Si bien existen preocupaciones sobre el desplazamiento de los trabajos de construcción tradicionales y algunos impactos ambientales de este método, Mannheimer cree que su tecnología tiene potencial.
“La gente no puede pagar una casa. Ese es el sueño americano, o más bien era el sueño americano. Tenemos que volver a eso. La tecnología de impresión 3D es una forma de hacerlo”, dijo.
El objetivo de Alquist es construir 200 casas impresas en 3D en los próximos tres años, principalmente en el suroeste de Virginia, con precios que comienzan en $175,000 dólares.
Según la Coalición Nacional de Vivienda de Bajos Ingresos, actualmente no hay ningún lugar en el país, donde alguien que trabaje a tiempo completo con el salario mínimo pueda permitirse alquilar un apartamento de dos habitaciones, y mucho menos comprar una casa nueva.
A raíz de la pandemia de covid-19, los precios de la madera han subido un 50%. Una casa típica construida con palos ahora cuesta, en promedio, $ 5,000 más que en 2020, de acuerdo con datos de la empresa.
Mannheimer dice que la compañía se está asociando con los gobiernos locales y estatales para arreglar eso.
Alquist planea trabajar con comunidades en EE.UU. para desarrollar nuevas unidades residenciales unifamiliares, multifamiliares, de uso mixto y para personas mayores.
Además, también busca incursionar en la construcción de carreteras, huecos de ascensores, muros de contención y otras estructuras de hormigón tradicionales utilizando tecnología de impresión 3D.
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